Al cierre de 2022, la cartera bruta de microcrédito de las 43 entidades afiliadas a Asomicrofinanzas cerró en $18,85 billones y creció 14,8%. Aunque la cantidad de entidades que ofrecen inclusión financiera ha ido en aumento en los últimos años, los microempresarios aún son reacios a solicitar crédito y en cambio el 14,2% de ellos se sigue financiando con el llamado ‘gota a gota’.
Así lo revela un estudio del gremio de instituciones microfinancieras en el que menciona que sobre el origen de los créditos se evidencia que entre las principales razones para que persista la informalidad sobre el microcrédito formal se destacan la baja capacidad productiva, la autoexclusión y la falta de educación financiera tanto a nivel urbano como rural.
El gremio dice que lo anterior se suma a las dificultades que tienen los microempresarios y de quienes tienen negocios por cuenta propia para acceder al crédito. Siendo la falta de RUT, carencia de registro en cámara de comercio y el no pagar aportes a salud y pensión al Sistema de Seguridad Social algunos factores que dificultarían el acceso.
El estudio también señala que quienes solicitan un microcrédito prefieren productos a plazos cortos, de bajos montos, a través de medios de pago más accesibles y con disminución de requisitos normativos, como factores a tener en cuenta por las entidades microcrediticias para combatir y mitigar el ‘gota a gota’.
“El estudio señala que la tasa de pobreza de los clientes de microcrédito comienza a disminuir a partir del tercer crédito, pasando de 67% al 66% en el nivel de pobreza”, explica la dirigente.
Frente al crédito en la base de la pirámide, el 65% de las operaciones de microcrédito se destinan a la población pobre; el mayor cambio se registra entre el primer y el quinto crédito, pues se pasa del 67% al 64% en el nivel de pobreza.
Los operadores de microcrédito tienen presencia en los 1.103 municipios y en 2022 realizaron más de 2 millones de desembolsos representados en $13,48 billones, con un aumento del 14,8% en el número de desembolsos y 23,5% en el monto desembolsado frente al 2021.
El comportamiento de la cartera bruta de microcrédito por tipo de municipio en 2022 fue del 67,18% para la zona urbana y del 32,82% para la zona rural; mientras que el número de microempresarios atendidos se distribuyó en 70,24% en la zona urbana y el 29,76% en la zona rural. En las cifras por género se encontró que el 52% de los clientes de microcrédito son mujeres.
PORTAFOLIO
Discussion about this post